lunes, 2 de marzo de 2009

Carnaval para el recuerdo

Por fin hubo ambiente de carnaval en El Puerto. Gracias a la iniciativa que tuvimos desde algunas de las agrupaciones callejeras y con el apoyo, escaso pero suficiente, de la concejalía de Fiestas del Ayuntamiento, el sábado de carnaval transcurrió con el éxito esperado. Es decir, varias agrupaciones callejeras (alrededor de 6 ó 7) a la que se unió un romancero (inesperado, trabajado y muy acertado, una gran sorpresa), la calle repleta de público deseoso de escuchar las letras de las agrupaciones y de tomarse algo en los bares de la zona.

La fiesta empezó a la hora prevista, las 13 horas. Poco a poco fueron llegando los grupos para interpretar sus letras y hacer que el público pasase un buen rato. La mañana se prolongó hasta las 17:30 más o menos, que fue el momento en el que el personal se retiró para hacer el descanso pertinente y retomar fuerzas para la noche. La noche empezó a animarse sobre las 8 y el ambiente carnavalero se prolongó hasta las 2:30 aproximadamente, cuando el carnaval dio paso al niñateo y a la botellona descontrolada.

En nuestro caso, hemos disfrutado del fin de semana como nunca. Se iniciaba el viernes con una actuación en el Bar Fermesa, del amigo David, con una actuación entre familiares y amigos, lugar donde, tras finalizar, continuamos la noche. Al día siguiente, comenzamos pronto, sobre las 11 de la mañana, y tras degustar unas pastelitos y batidos, comenzamos el día con un pasacalles desde nuestro local de ensayo hasta la calle Luna, por la que empezó a seguirnos el público que estaba congregándose por las inmediaciones para disfrutar de la mañana.

Una vez allí, comenzamos con un primer pase, durante el cual, fueron llegando el resto de los grupos, “El Comando Veneno” de José Ganaza “el loco”, “los paparazzis” de Jesuli, los chavales de “Barajando un nombre”, la chirigota del hogar del pensionista, y el romancero “Zuper Puerto y Zuper Ratón”. Cada uno fue buscando el mejor rinconcito para ofrecer sus coplas. A nosotros también se nos unieron la comparsa de Cádiz “Los Calavera”, la comparsa portuense “El escondite del viento” de Raúl Villanueva, la chirigota de Emilio y las comparsas infantiles y juveniles del Puerto.

Así se desarrolló la mañana, entre coplas y copas. Tuvimos grandes actuaciones, y el público parece que disfrutó bastante, comentando la evolución que nuestro grupo había tenido desde aquellos comienzos con los monaguillos o “los que viven de la ostia”, nuestra afinación, la vocalización y lo acertado de las letras de éste año. Todo fueron elogios, no sólo de los vecinos del Puerto, sino también de foráneos que año tras año son fieles seguidores de nuestro grupo, venidos desde Linares, Jaén, Extremadura, Sevilla, Dos Hermanas...

La noche fue igualmente tumultuosa, aunque el nivel de ruído subió bastante y la posibilidad de escuchar de forma clara y poder interpretar de forma adecuada fue menor. Seguimos recorriendo las calles y respondiendo a las solicitudes del público, hasta que observamos que el ambiente se iba distorsionando, y decidimos pasar a la retirada.

A modo de resumen, destaco como positivo la tremenda aceptación que ha tenido la iniciativa de levantar el carnaval desde lo que es su origen, la calle, con más gente que en los últimos años deseosa de pasarlo bien. En el aspecto negativo resaltaría el fiasco de concurso que organizó el ayuntamiento (está claro que si no hay pasta, las agrupaciones se decantarán por cualquier mísero contrato, sin merecerle la pena concursar para no se sabe qué; es mejor llevárselo calentito), y la falta de respeto de algunas personas y agrupaciones cuando otros grupos están interpretando sus repertorios (en esto todavía estamos a años luz del carnaval de la calle en Cádiz).

Y sólo un deseo: que esto que se ha vivido éste año en el carnaval del Puerto sea el principio del resurgir de la que ha sido durante mucho su fiesta principal, y que la calle sea tomada por Don Carnal de forma ininterrumpida desde el viernes hasta el domingo, que no sea sólo el sábado su día grande. Pero eso ya no depende de nosotros. Hemos dado la idea y el 1º impulso. El resto está en manos de los que mandan. Gracias a todos los que han colaborado en esta iniciativa y a los que la han “permitido”.

Saludos.